Gripe aviar: Moderna avanzará en el desarrollo de una vacuna

El gobierno de Estados Unidos invirtió en la farmacéutica para la creación de la inoculación. Preocupa la propagación de la enfermedad.

El gobierno de Estados Unidos destinó u$s176 millones a Moderna para el desarrollo de la vacuna contra la gripe aviar. 

La gripe aviar genera preocupación en las autoridades de Estados Unidos debido a la cantidad de casos que se han registrado desde marzo. Por esa razón, el gobierno estadounidense otorgó u$s176 millones a Moderna para el desarrollo de una vacuna contra la enfermedad.

El virus H5N1 ha infectado a más de 130 rebaños de doce estados de EEUU y tres trabajadores se han contagiado. Esta situación ha preocupado a los científicos, quienes temen que la propagación del virus pueda generar que el mismo mute y adquiera la capacidad de propagarse más fácilmente entre personas.

La vacuna de Moderna contra la gripe aviar

La farmacéutica recibió fondos de la Autoridad de Investigación y Desarrollo Biomédico Avanzado. Eso lo utilizará para completar la última etapa de desarrollo de la inoculación y la prueba de una vacuna prepandémica. Según un comunicado que emitió la compañía, la misma estará basada en la tecnología ARNm.

La fabricación de la vacuna tardaría de 4 a 6 meses.

Moderna comenzó con el estudio sobre la seguridad e inmunogenicidad de su vacuna contra la gripe aviar en 2023. La misma lleva el nombre de mRNA-1018 y está enfocada a adultos sanos de 18 años o más. La investigación se centró en el subtipo H5 y H7 del virus y tienen previsto que los resultados se den a conocer este año para continuar con el desarrollo de la vacuna.

Moderna utiliza la misma tecnología de su vacuna contra el Covid-19

La inoculación de la farmacéutica estadounidense utiliza la misma tecnología que la de su vacuna contra el Covid-19: ARNm o ARN mensajero. Según el director ejecutivo de Morderna, Stéphane Bancel: "La tecnología de vacunas de ARNm ofrece ventajas en eficacia, velocidad de desarrollo y producción, escalabilidad y confiabilidad para abordar brotes de enfermedades infecciosas, como se demostró durante la pandemia de Covid-19".

La fabricación de la vacuna utilizando esta tecnología puede llevar entre 4 a 6 meses y las dosis se utilizarían en primer lguar para inocular a los trabajadores de granjas lecheras y personas con exposición al virus.