Lo primero es tener en mente que el trabajo de campo se realizó entre el 5 y el 15 de septiembre, por lo que pegaron de lleno el escándalo “Karina”, el resultado electoral de la elección en la Provincia de Buenos Aires (domingo 7) y el comienzo de lo que fue la peor semana financiera de la gestión Milei.
- ámbito
- Negocios
- Elecciones 2025
La confianza en el Gobierno no le presagia la mejor elección
Días atrás la Escuela de Gobierno de la Universidad Torcuato di Tella (UTdT) difundió su habitual Indice de Confianza en el Gobierno, que refleja las desilusiones de los argentinos con la actual administración y no parece estar cerca de preverle el mejor de los resultados electorales el mes que viene.
-
Cierre de listas: qué se vota el 26 de octubre en la Argentina
-
Dónde voto elecciones 2025: consultá el padrón electoral

La elección de octubre prometía ser “una papa” para la Libertad Avanza. Sin embargo Javier Milei no ha hecho otra cosa que seguir perdiendo la confianza de quienes apostaron por el en Diciembre de 2023, no tiene presenta la mejor cara para Javier Milei
En un sentido contrario, lo que vino después, los anuncios de apoyo norteamericano, la rebaja provisoria de las retenciones y los créditos del BID y el Banco Mundial, que derivaron en lo que podemos definir como la mejor semana financiera para la actual administración, pudiendo dar la idea de una gran gestión de gobierno, no están factorizados en los datos.
Esto no significa “per se” que, si la encuesta se realizara hoy, podríamos estar hablando de un incremento en la Confianza del Gobierno, sino mas bien que la baja registrada en el ICG durante septiembre no hubiera sido tan significativa, que de todas maneras seguiría estableciendo un mínimo desde diciembre de 2023.
La buena noticia detrás de esto, podríamos pensar, es que la medición de octubre posiblemente no será tan negativa como la de los dos meses anteriores. Esto no significa nada, pero en cerca del 60% de los casaos en que tuvimos una caída del ICG similar o mayor a la actual (21% en dos meses), el tercer mes registró una suba; por otro lado, ese tercer mes anotó una suba media de 1.4% y una promedio de 0.21%.
Estrictamente no podemos decir que en términos históricos la medición sobre la confianza en la actual administración sea mala, está apenas debajo del promedio histórico de todas las administraciones desde noviembre de 2001 (1.94). El problema pasa por otro lado.
Si bien como señalamos en otro trabajo el ICG no es uno de los factores claves detrás del resultado de las elecciones legislativas, el ultimo guarismo apenas está por encima del promedio histórico para el mes previo a los comicios (1.94 frente a 1.92), superado de lejos por lo de Macri (2.86 puntos) y Néstor Kirchner (2.11 puntos).
Lo interesante aquí es que solo Macri ganó en la legislativa, mientras N.K. perdió, demostrando que este no es un factor “sine qua non” para arrasar o ser arrasado en una elección de medio termino.
El actual gobierno arrancó su gestión con una gran dicotomía: una bajísima confianza de los consumidores (solo menor con Rodriguez Saa y Duahlde) y una elevadísima confianza en su gestión, la mayor para el arranque de una presidencia desde que se elabora la serie que, con el paso del tiempo, en especial a partir de mayo del año pasado se fue normalizando.
No implica nada, aunque hace al contexto: un mes antes de las elecciones de mediotérmino previas el Indice de Confianza de los Consumidores de la UTdT, estaba mejor (si mejor es un valor más alto) con Macri, las dos administraciones de CFK y la de A. Fernández que ahora.
Cuando desagregamos el ICG según sus componentes vemos que ahora los mas desilusionados con la gestión gubernamental son quienes han sido víctimas de un delito, que al asumir en diciembre de 2023 estaban dentro del grupo que más confiaba en la nueva administración, las mujeres, quienes pensaban que poco cambiaria en el frente económico y aquellos con estudios secundarios.
Ninguno de los componentes presenta mejoras, siendo los que pensaban en aquel entonces que la situación económica mejoraría, seguidos por el grupo de entre 18 y 29 años de edad, los habitantes del interior del país y quienes tienen estudios universitarios, los menos desilusionados.
Si el trabajo de la UTdT es certero, del juego de estas variables -que mostrarían entre quienes falló y entre quienes falló más el gobierno; i.e.: donde perdió más votos y donde podría recuperarlos más fácilmente- es que podría darse el resultado del próximo 26 de octubre
De todas formas, lo más que podríamos decir es que el ICG está en un punto que no permite realizar ninguna proyección electoral… ahora, apuntar a una victoria del oficialismo por la gran confianza que tiene la gente en el gobierno, seguro que no lo hace.
Dejá tu comentario